TÍTULO: La ley de la atracción
AUTORA: Simone ElkelesSELLO: Versátil Ediciones
ISBN: 9788492929344
GÉNERO: Juvenil
SERIE: 2º ~ Química Perfecta
PUNTUACIÓN: 8/10
El primer amor
es... inevitable.
Carlos se niega
a aceptar la vida que su hermano mayor, Alex, le ha organizado. Prefiere seguir
viviendo al límite y forjarse su propio camino como hizo Alex. Pero Alex lo
arregla todo para que Carlos se vaya a vivir con un antiguo profesor y su
familia, y evite así la cárcel.
Todo se
complica cuando Carlos conoce a Kiara, la hija del profesor, muy diferente a
las chicas por las que suele sentirse atraído...
Ley de la
atracción cuenta la historia de Carlos Fuentes, hermano de Alex.
Un chico que
esta desconforme con la decisión que ha tomado su hermano de salir de los
Latino Blood.
Piensa que
durante todo lo que le queda de vida va a seguir siendo un chico rebelde que
necesita trabajar muy muy duro y con una paga miserable para poder ayudar a su familia y al el mismo.
Piensa que nadie confía en él.
Sin embargo,
todo cambia cuando le tienden una trampa y se tiene que ir a vivir a casa de un
antiguo profesor de Alex, el señor Westford. Que por casualidades del destino
es el padre de Kiara, la chica que se encargó durante la primera semana de
instituto de Carlos de enseñarle el funcionamiento de tal.
Vivir en la
misma casa hace que su química cada vez se vaya haciendo más fuerte y el amor empiece a surgir.
Si comparamos
este libro con su anterior (Química perfecta) en mi opinión pienso que no
tienen nada que ver. El tema del amor se trata, pero no tanto como en QP. En
este libro se trata más el tema de las drogas, de salir adelante, del esfuerzo etc.
Mis dos personajes
favoritos han sido Ben, el hermano de Kiara (un niño encantador, inocente,
cariñoso, divertido…) y Tuck el mejor amigo de Kiara que en mi opinión pienso
que está loco xD y que es muy muy muy divertido.
Mi parte favorita del libro es esta, narrada por Carlos.
—¿Nunca haces cosas que no deberías hacer? Venga,
Kiara, déjalo ya. Es imposible que seas tan inocente como aparentas ser. Eres
igual que el resto de nosotros, los pecadores. Vale, no fumas, no bebes y
tampoco te drogas. Pero seguro que tienes otros vicios. Todo el mundo tiene
alguno. —Ella no responde, así que continúo—. Dime algo que hagas que me deje
con la boca abierta.
Kiara se pone cómoda en el sofá.
—¿Qué te deje con la boca abierta?
—Sí. Con la boca abierta.
Se arrodilla en el sofá y se inclina hacia mí.
—Pienso en ti, Carlos —me susurra al oído—. Por la noche, en la cama. Imagino cómo sería besarte, nuestras lenguas acariciándose, tus manos hundidas en mi pelo y las mías recorriendo las curvas de tu pecho desnudo.
Kiara se pone cómoda en el sofá.
—¿Qué te deje con la boca abierta?
—Sí. Con la boca abierta.
Se arrodilla en el sofá y se inclina hacia mí.
—Pienso en ti, Carlos —me susurra al oído—. Por la noche, en la cama. Imagino cómo sería besarte, nuestras lenguas acariciándose, tus manos hundidas en mi pelo y las mías recorriendo las curvas de tu pecho desnudo.
¡Dios! el fragmento del lbro, si todavía no estaba del todo convencida me ha terminado por convencer. El chico si que tuvo que quedarse con la boca abierta. Buena reseña.
ResponderEliminarUn beso. Nos leemos. http://rincondeharu.blogspot.com.es